Tras la operación, el doctor se dirige al paciente:
– Tengo una buena y una mala noticia…
– Empiece por la buena, doctor.
– La buena es que usted no volverá a tener más hijos…
– Bien, doctor, bien… ¿Y la mala?
– La mala es que… bueno, nos hemos equivocado un poco en la operación, y le hemos cambiado de sexo….
Montse Fernández Fernández