En el oeste americano, entra un indio en un bar. Se le acerca el camarero a
preguntarle qué quiere y éste le dice:
–Indio fuerte querer bebida fuerte.
El camarero le sirve un whisky de patata que podrÃa matar a un caballo, pero el
indio se lo toma tranquilamente y se va.
Al dÃa siguiente, vuelve y le dice al camarero:
–Bebida de ayer bebida de niños, indio fuerte querer bebida fuerte.
El camarero, asombrado, decide prepararle entonces un cóctel con el mismo
whisky y aguardiente mejicano concetrado:
–Tome, aquà tiene algo fuerte.
El indio se lo toma y se va. Al dÃa siguiente:
–Lo de ayer no ser fuerte. Indio fuerte querer bebida fuerte.
Desesperado, el camarero decide hacer una mezcla de todo: vodka, aguardiente,
alcohol puro, pólvora, pimienta, guindillas, un poco de lejÃa y unos restos de la
semana anterior de puré de alubias.
–Esto sà que es sólo para hombres fuertes.
El indio se lo toma mientras el camarero rÃe entre dientes, y luego se va.
Al dÃa siguiente vuelve, y el barman, asombrado de verlo todavÃa en vida le
pregunta:
–¿Qué tal? ¿Estaba buena la bebida?
–Muy bien. Indio fuerte y bebida fuerte. ¡Ayer tirar pedo y quemar caballo!!
Alingeru Ãlvarez