Estaban tres locos en un avión armando un tremendo alboroto, por lo que el piloto le dijo al copiloto:
―Vaya a ver qué les pasa a esos tipos…
El copiloto se dirigió a los locos, y volvió a la cabina de pilotaje. Entonces el piloto le preguntó:
― ¿Qué hiciste para que se quedaran quietos?
― Nos pusimos a jugar a que estaban en la escuela y les mandé tareas.
Cinco minutos después, volvieron a alborotarse,  y el piloto le dijo al copiloto:
―Vaya a ver qué les pasa a esos tipos esta vez.
El copiloto se fue y regresó al cabo de poco tiempo.
― ¿Qué hiciste ahora?
―Revisé sus tareas y como las hicieron bien, les abrà la puerta y les dejé irse al recreo.
Maider Fernández Illera